Con el frío, apetece un buen plato de cuchara. La llegada del invierno viene acompañada de auténticos manjares. Las setas que empiezan a proliferar en otoño son un buen ejemplo. La Tuber Melanosporum, otro. Con este panorama, nos nos queda más remedio que preparar una receta con trufa negra y champiñones en forma de crema. La querrás… ¡sí o sí!
Toma nota de los ingredientes y de los preparativos para dar en el clavo con un plato para todos los públicos pero, sobre todo, para los amantes de la cocina de invierno.
Como ya sabrás, cada receta con trufa negra tiene su truco. En este caso, te proponemos trufar la mantequilla previamente para elevar el sabor y el aroma de la preciada trufa de invierno al máximo exponente.
Ingredientes
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300 gramos de champiñones
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850 ml de caldo de verduras
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1 diente de ajo
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1 cebolla
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2 puerros
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Una trufa de invierno (Tuber Melanosporum)
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Una copita de coñac
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25 gramos de mantequilla (¡si está trufada mejor!)
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Sal y pimienta
Preparativos
Te recomendamos encarecidamente que pruebes a trufar la mantequilla. Hazlo un par de días antes de preparar la receta, mezclando trufa negra rallada con mantequilla en punto de pomada, enrollándola en forma de cilindro y guardándola en la nevera.
Paso a paso
Cortar los champiñones y los puerros (ambos previamente bien lavados para eliminar todos los restos de tierra), la cebolla y el ajo.
Sofreír a fuego medio.
Cuando los champiñones empiecen a soltar agua, añadir la copa de cognac, dejar que este se evapore y, cuando hierva, añadir el caldo de verduras caliente.
Hervir a fuego bajo durante unos 20 minutos.
Batir y añadir la mantequilla (a temperatura ambiente) y la leche (previamente calentada) hasta obtener una textura suave y homogénea. Si la mantequilla se ha trufado unos días antes, ¡el sabor y el aroma a Tuber Melanosporum se multiplicarán!
Al final, salpimentamos al gusto y añadimos un chorro de aceite suave. Lo ideal es que también esté trufado. Lo utilizaremos también para darle más sabor a unas rebanadas de pan tostado para acompañar una receta con trufa negra perfecta para afrontar el frío.
El último toque, como suele ser habitual en nuestras recetas, es decorar con unas finas láminas de trufa negra.
Sólo queda coger la cuchara y dejarse llevar.